Padre indignado

Hospitales del Minsa rechazan atención a hijo baleado por evitar robo de celular

El responsable del menor denuncia retraso en atención médica para su hijo baleado tras intento de robo de celular, a pesar de la afirmación del Instituto Nacional de Salud San Borja sobre una atención multidisciplinaria.

Puente Piedra.- Un adolescente de 15 años fue herido de bala por delincuentes que le robaron su celular en Puente Piedra. A pesar de ser trasladado a varios hospitales para recibir atención urgente y recuperarse, su padre denunció que ninguno de los centros médicos a los que lo llevaron lo ha atendido.

Según el padre, tanto el Hospital de Puente Piedra, el Arzobispo Loayza y el del Niño de San Borja no tienen camas disponibles ni la especialidad necesaria para tratar al joven, cuya vida está en peligro.

"Una movilidad lo trasladó a emergencias del Hospital Puente Piedra, le dieron primeros auxilios, pero nos dijeron que no hay la especialidad en el hospital para que mi hijo sea atendido", expresó en diálogo con Latina.

"Toda la familia estamos destrozados. Anoche me amanecí en el hospital. En el hospital, no hay atención, nos derivan al Loayza y en este no nos reciben, tampoco hay atención, no hay cama y nos dijeron que por ser menor de edad tiene que ser derivado al Hospital del Niño de San Borja. Lo hemos llevado a San Borja, pero no nos reciben", añadió.

También mencionó que él y sus familiares están en el Hospital del Niño, esperando que el joven sea sometido a una cirugía para extraerle la bala.

"Desde toda la noche hasta ahora no lo intervienen. Él tiene un proyectil en el cuello. A las 6 a. m. he salido del hospital y todavía no está programada (su operación), recién está en evaluación. Nuestro sistema de salud espera que mueran", declaró.

Hablando sobre el robo, explicó que su hijo salió de la escuela y estaba camino a casa. Dijo: “Cuando ocurrió este acto delictivo, yo estaba en mi trabajo. Mi hijo estaba regresando a casa después de clases. Me informaron que habían asaltado y disparado al menor, llamé a mis familiares y me lo confirmaron”.

"Este lugar es tierra de nadie, siempre roban. No hay seguridad ni garantía para los niños. Lamentablemente, nuestro sistema de seguridad está deshecho. Pedimos a las autoridades, al público en general que nos apoyen porque ahora mi hijo está entre la vida y la muerte", agregó.

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