Educación en Crisis
¡Basta ya! Padres de familia y docentes protestan por el mal estado de colegios públicos en regiones
A pocos días del comienzo del año escolar, los estudiantes en Chiclayo, Arequipa y Puno se verán enfrentados a la decisión de estudiar de forma virtual o en aulas prefabricadas.
Perú.- Ante el inminente comienzo de clases este lunes, varios colegios públicos en Lambayeque, Arequipa y Puno enfrentan importantes deficiencias en su infraestructura, dejando a los estudiantes en una situación precaria.
En Chiclayo, más de 1.500 alumnos de la institución educativa Monseñor Juan Tomis Stack se verán obligados a iniciar clases de forma virtual, ya que los módulos temporales destinados para albergarlos no han sido completados.
Esta situación ha generado preocupación entre los padres de familia y los profesores, quienes consideran que esto representa un serio obstáculo y un retroceso en el proceso de aprendizaje de los niños. En respuesta, llevaron a cabo una protesta ayer para exigir una solución a esta problemática.
“El reclamo va directamente a Lima, ya que el traspaso de la Autoridad para Reconstrucción con Cambios (ARCC) a la Autoridad Nacional de Infraestructura ha dejado un vacío legal en la transferencia de las partidas de los proyectos, como en el caso del colegio Tomis Stack. Esto ha impedido terminar el plan de contingencia (módulos)”, mencionó el director Fernando Soria.
Más de 50 alumnos de la escuela María Auxiliadora en Chiclayo, ubicada en el distrito de Monsefú, continuarán estudiando por segundo año en aulas temporales sin cercado perimétrico debido a que la reconstrucción de su infraestructura está detenida. Además, carecen de cocina, utensilios y comedor para el servicio de Qali Warma.
Similarmente, más de 800 estudiantes del colegio Nuestra Señora de Fátima en Chiclayo enfrentan la misma situación, ya que estudiarán en aulas temporales sin acceso a agua ni electricidad, debido a la paralización de la reconstrucción de su plantel.
Problemas en el sur
En el colegio público Julio C. Tello, ubicado en el distrito de Paucarpata en Arequipa, Giovanna Carpio, la subdirectora, ha solicitado la instalación de aulas prefabricadas debido a la situación de deterioro de un pabellón con 8 salones. Los techos de estos salones se encuentran en riesgo de derrumbarse en cualquier momento. Esta escuela, con 50 años de historia, enfrenta esta urgente necesidad.
Por otro lado, más de 800 estudiantes del colegio Nuestra Señora de Fátima en Chiclayo enfrentan una situación similar. Estos estudiantes se verán obligados a estudiar en módulos sin acceso a agua ni electricidad, ya que la reconstrucción de su plantel educativo también se encuentra detenida.
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