Desafíos Urgentes
El alarmante aumento de la anemia infantil en el país
Consecuencias económicas adversas y una menor priorización en el presupuesto público han contribuido a este preocupante panorama, limitando el desarrollo y las oportunidades futuras de los niños afectados.
Lima.- La problemática de la anemia infantil ha alcanzado cifras preocupantes en los últimos años en el país, revelando un incremento constante que ahora alcanza al 43,1% de niños menores de tres años. Este aumento se atribuye en parte a condiciones económicas desfavorables en los hogares, así como a una disminución en la priorización de esta problemática en el presupuesto público.
La anemia, resultado de la deficiencia de hierro, afecta de manera significativa el desarrollo cognitivo, psicomotor y emocional de los niños, lo que a su vez limita sus oportunidades educativas y laborales futuras.
Entre los años 2019 y 2023, la tasa de anemia infantil ha experimentado un aumento del 3%, llegando a afectar a más de 700 mil menores de tres años para finales del 2023, un incremento de 50 mil casos adicionales con respecto al periodo pre-pandemia.
Este incremento se observa a nivel regional, destacando lugares como Lima Provincias, Cajamarca y Huánuco, donde la incidencia de anemia ha aumentado en más de 8 puntos porcentuales. Incluso en regiones como Puno, con un aumento más modesto en los últimos años, la anemia sigue siendo un problema grave que afecta al 70% de los niños.
La situación es especialmente preocupante en Lima Metropolitana y Callao, donde la tasa de anemia ha pasado del 30,4% al 35,1% entre 2019 y 2023. Este incremento se refleja en todos los estratos socioeconómicos, siendo notable en los quintiles superiores de riqueza, donde ahora uno de cada tres niños sufre de anemia.
La vulnerabilidad económica, agravada por una alta inflación, ha dificultado que las familias adquieran alimentos ricos en hierro, contribuyendo así al aumento de la anemia.
Expertos como Arlette Beltrán y Juan Castro de la Universidad del Pacífico sugieren que cerrar las brechas en indicadores relacionados con la nutrición, las condiciones de vivienda y los servicios de salud podría reducir la anemia infantil hasta en un 15% desde los niveles actuales.
Esto requeriría un esfuerzo multisectorial en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y refuerza la urgencia de implementar el Plan Multisectorial para la Prevención y Reducción de la Anemia Materno Infantil.
En este contexto, es esencial que el plan establezca metas ambiciosas y realistas para abordar el problema de la anemia infantil. La meta actual de reducir la anemia al 37% para el año 2030 podría resultar insuficiente dada la magnitud del problema y el ritmo de aumento observado en los últimos años.
De lo contrario, miles de niños continuarán enfrentando condiciones deficientes de desarrollo, lo que dificultará aún más la reversión del círculo de pobreza que se ha agudizado durante este periodo.
Fuente: Andina
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