Opiniones
Golpismo cambió vacancia por acusación de traición a la patria contra Castillo
Por Jaime Antezana
El país ha entrado nuevamente al "caos político total" (Sinesio López). Está vez el "caos político total" del 2020 y 2021 no será a través de la vacancia por "incapacidad moral permanente", como ocurrió con PPK (quien tuvo que renunciar) y la vacancia/golpe a Vizcarra.
El camino que han optado las derechas golpistas, al no poder llegar a los 87 votos necesarios para la vacancia, es el de la Acusación Constitucional por presunta traición a la patria e infracción constitucional contra el presidente Pedro Castillo. ¿En qué sustentan la traición a la patria? En qué Castillo habría ofrecido una salida al mar para Bolivia.
En realidad, las derechas mafiosas obsesionadas por sacar a Castillo de palacio de gobierno han buscado un atajo. Lo que han hecho es aprobar una denuncia elaborada por "inclitos" ciudadanos de la derecha: los fujimoristas Fernan Altuve y Francisco Tudela y la abogada de Fuerza Popular Lourdes Flores Nano, entre otros.
Esa denuncia fue convertida en un informe por los congresistas Norma Yarrow de Avanza País y José Cueto de Renovación Popular, en la que recomendaban acusar constitucionalmente por traición a la patria a Pedro Castillo. La congresista Yarrow y Cueto pertenecen a variantes del fujimorismo golpista y criminal.
Ese informe fue el que, este lunes 28 de febrero, la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales aprobó calificando la denuncia contra Pedro Castillo por presunta traición a la patria. El informe fue aprobado por 9 votos a favor y 8 en contra. No hubo abstenciones.
Ahora se entiende por qué en la reunión de la Junta de Portavoces, realizado horas antes, no -con excepción del congresista Jorge Montoya, un marino de piscina de plastico- incluyeron en la agenda la moción de vacancia. Era obvio que tenían los votos para aprobar acusación por traición a la patria.
¿Por qué ese informe aprobado por las derechas brutas y mafiosas es un atajo para "decapitar" a Castillo? La razón principal es que solo necesitan 66 votos para que sea aprobado en el pleno del Congreso y zas cae la "cabeza" de Castillo. Todo indicaría que cuentan con esos votos. Esa es la jugada.
No obstante, si bien han recurrido a un atajo o, más exactamente, a una leguleyada para lograr su objetivo máximo desde que Castillo ganó las elecciones, sacarlo lo más pronto posible de Palacio de Gobierno, ese atajo tiene su procedimiento. El informe debe ir a la Comisión Permanente y luego al Pleno. Esos son los dos pasos.
Eso sí, en esos dos escenarios, Castillo podrá defenderse. Sin embargo, hay una diferencia, los golpistas y mafiosos de las extremas derechas tendrán el dominio del escenario. Controlarán el proceso con los 66 votos. En otras palabras, forzando la figura de traición a la patria contra el presidente Pedro Castillo, estamos ante un nuevo intento de golpe de estado.
Lo que no lograron en las urnas lo quieren lograr utilizando leguleyadas. Eso tiene un nombre preciso y sin eufemismos: golpe parlamentario. O, simplemente, golpe de Estado. Eso es esa acusación constitucional que el fujimorismo y sus variantes han armado silenciosamente. Hay que parar el golpe.
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