Seguridad desde el arranque
Windows 11 instalará parches automáticamente durante configuración inicial OOBE
Solo aplica en dispositivos corporativos gestionados con Intune y ESP.
Microsoft anunció que a partir de septiembre de 2025, Windows 11 instalará automáticamente las actualizaciones durante la configuración inicial (Out-of-the-Box Experience, OOBE). La medida busca que los equipos inicien ya protegidos, reduciendo la carga de trabajo para administradores de TI y reforzando la seguridad en entornos corporativos y educativos.
La compañía precisó que esta función estará disponible únicamente en dispositivos con Windows 11 versión 22H2 o superior, siempre que sean ediciones Pro, Enterprise, Education o SE, vinculadas a Microsoft Entra (antes Azure AD) o en escenarios híbridos, gestionados mediante Microsoft Intune y configurados con perfiles Autopilot ESP.
Una transición clave
El cambio llega en un momento estratégico: el fin del soporte de Windows 10, previsto para octubre de 2025. Muchas empresas aceleran la migración hacia Windows 11, y la posibilidad de aplicar parches desde la configuración inicial se perfila como un alivio importante para las áreas de tecnología.
De esta forma, los equipos estarán protegidos desde el primer encendido, evitando vulnerabilidades y disminuyendo tiempos de implementación. “Se trata de ofrecer seguridad y eficiencia desde el arranque”, subrayaron voceros de la compañía.
Requisitos técnicos
Para que la instalación automática funcione, los dispositivos deberán contar con el parche cero días de agosto de 2025 (OOBE ZDP) o haber sido preparados con la actualización no relacionada con seguridad de junio de 2025.
Los nuevos perfiles Autopilot ESP tendrán esta opción activada de manera predeterminada. En cambio, los perfiles existentes deberán ser ajustados manualmente desde Intune, habilitando la opción “Instalar actualizaciones de calidad de Windows”.
Beneficios inmediatos
Con esta función, Microsoft apunta a tres ventajas principales:
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Seguridad garantizada: equipos protegidos desde el arranque, sin riesgo por falta de actualizaciones.
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Reducción de carga de trabajo: los administradores de TI ya no deberán ejecutar parches manualmente tras la entrega de los dispositivos.
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Cumplimiento corporativo: mayor facilidad para mantener alineadas las políticas de seguridad en organizaciones grandes.
Un paso hacia la modernización
La decisión refuerza la estrategia de Microsoft de impulsar la adopción de Windows 11 frente al final del ciclo de Windows 10. Con esta mejora en el proceso de configuración, la empresa asegura que sus clientes empresariales puedan contar con equipos listos para trabajar desde el primer día, con menor exposición a amenazas.
“Con esta actualización automática, los usuarios recibirán dispositivos actualizados, seguros y listos para integrarse a sus flujos de trabajo sin retrasos”, destacaron desde la firma tecnológica.
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