Lima.- La reconocida orquesta de cumbia peruana Armonía 10 enfrenta un momento de profundo dolor tras el asesinato de su cantante Paul Hambert Flores García, conocido como "Russo", en un violento ataque armado.
El hecho ocurrió en la madrugada del domingo 16 de marzo de 2025, cuando el bus de la agrupación fue baleado por desconocidos en motocicletas en el distrito de San Juan de Lurigancho, Lima. Flores, de 39 años, recibió disparos que le costaron la vida pese a ser trasladado de emergencia al hospital Hipólito Unanue.
Armonía 10 emitió un comunicado en redes sociales lamentando la pérdida y prometiendo justicia:
"Con todo pesar en nuestros corazones, comunicamos el sensible fallecimiento de Paul Flores. El atentado que hemos sufrido como orquesta arrebató la vida de uno de los nuestros", expresaron. Además, aseguraron que "entregaremos todas nuestras energías a que esto no quede impune", extendiendo condolencias a la esposa, el hijo menor, los padres y demás familiares del cantante.
La Policía Nacional del Perú (PNP), a través de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), ya inició las diligencias para esclarecer el caso. Agentes se desplazaron al hospital y al lugar del ataque para recolectar evidencias.
Aunque el chofer del camión de la orquesta, Billy Castro, afirmó que no habían recibido amenazas previas, el incidente pone en evidencia la creciente inseguridad en la zona. San Juan de Lurigancho, uno de los distritos más poblados de Lima, ha sido escenario de múltiples episodios de violencia, lo que ha generado alarma entre los ciudadanos.
Paul Flores, natural de Piura, se unió a Armonía 10 a los 17 años y se convirtió en una de las voces más queridas de la agrupación.
Su muerte no solo afecta a sus compañeros y seres queridos, sino también a los miles de seguidores que disfrutaban de su talento en los escenarios.
Familiares y amigos acudieron al hospital tras conocerse el trágico desenlace, mientras la orquesta pidió respeto a los medios y prometió actualizar información conforme avance la investigación.
Este suceso ha reavivado el debate sobre la seguridad ciudadana en Perú, especialmente en áreas vulnerables como San Juan de Lurigancho.
Las autoridades, encabezadas por la PNP, enfrentan el desafío de identificar y capturar a los responsables de este crimen que enluta a la música peruana.
La promesa de Armonía 10 de buscar justicia resuena como un llamado a no dejar este caso en el olvido.
