El último adiós al ícono del cine francés

Alain Delon, leyenda del cine, fallece a los 88 años en su hogar de Douchy

El actor de 'Rocco y sus hermanos' y 'El silencio de un hombre' parte dejando un legado cinematográfico imborrable.

El mundo del cine despide a una de sus figuras más icónicas, Alain Delon, quien falleció a los 88 años en su residencia en Douchy, Francia.

La noticia fue anunciada por sus tres hijos, Alain Fabien, Anouchka y Anthony, en un comunicado transmitido por la AFP el pasado domingo 18 de agosto de 2024. "Falleció en paz, rodeado de su familia y su perro Loubo," señala la declaración, en la que también se solicita respetar la intimidad de la familia en estos momentos de duelo.

Nacido el 8 de noviembre de 1935 en las afueras de París, Delon tuvo una infancia marcada por dificultades. A los cuatro años, fue puesto en un hogar de acogida tras el divorcio de sus padres, y su juventud estuvo llena de desafíos, incluyendo expulsiones escolares y una breve estancia en la Marina, que lo llevó a servir en la entonces Indochina.

A su regreso a Francia a mediados de los años 50, Delon comenzó a trabajar en diversos empleos, hasta que el destino lo llevó a un encuentro con el actor Jean-Claude Brialy, quien lo presentó en el Festival de Cine de Cannes.

Fue allí donde un cazatalentos estadounidense lo descubrió, marcando el inicio de una carrera cinematográfica que lo convertiría en una leyenda.

El talento de Delon se hizo evidente en películas como "Rocco y sus hermanos" (1960) y "El gatopardo" (1963), ambas dirigidas por el aclamado cineasta italiano Luchino Visconti. Sin embargo, fue con el papel en "El silencio de un hombre" (1967) de Jean-Pierre Melville que consolidó su estatus como una estrella internacional, encarnando a un asesino a sueldo de pocas palabras y profunda introspección.

A lo largo de su carrera, Alain Delon trabajó con grandes del cine, tanto en Europa como en Hollywood, aunque nunca alcanzó el mismo nivel de fama en Estados Unidos. "No me preocupa lo que haga un amigo.

Cada uno es responsable de sus propios actos," declaró en 1970 al New York Times, refiriéndose a sus conocidos en el mundo del crimen. Esta faceta de su vida, siempre envuelta en misterio, no opacó su brillante trayectoria artística.

En la década de los 70, Delon protagonizó películas como "Borsalino" (1970) junto a Jean-Paul Belmondo, y "La Piscine" (1969), donde compartió pantalla con su entonces amante, Romy Schneider, en una historia cargada de pasión y celos en la Riviera Francesa.

En los últimos años, Delon vivió alejado de los focos, especialmente tras sufrir un ictus en 2019. Sin embargo, volvió a brillar brevemente en mayo de ese año cuando recibió una Palma de Oro honorífica en el Festival de Cannes. "Es un poco un homenaje póstumo, pero en vida," comentó emocionado durante su discurso.

La despedida de Alain Delon marca el fin de una era en el cine francés y mundial. Su legado, repleto de interpretaciones memorables y una vida tan compleja como sus personajes, permanecerá en la memoria de sus admiradores y en la historia del séptimo arte.


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