San Borja.- La presidenta Dina Boluarte asistió al velatorio del expresidente Alberto Fujimori Fujimori en la sala Nasca del Ministerio de Cultura, donde ofreció sus condolencias a la familia del fallecido exmandatario.
La Jefa de Estado estuvo acompañada por el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, y los ministros de Cultura, Fabricio Valencia; Educación, Morgan Quero; y Desarrollo e Inclusión Social, Julio Demartini.
Durante el evento, Boluarte expresó su solidaridad a los hijos del expresidente, Keiko y Kenji Fujimori, en este momento de dolor.
El expresidente Alberto Fujimori falleció ayer 11 de septiembre, rodeado de su familia, tras luchar contra un cáncer que afectaba su salud.
Desde su excarcelación en diciembre de 2023, tras la restitución del indulto humanitario concedido por el expresidente Pedro Pablo Kuczynski y validado por el Tribunal Constitucional, Fujimori residía en la vivienda de su hija Keiko.
El gobierno de la presidenta Boluarte decretó tres días de duelo nacional en honor a Fujimori, disponiendo además que el Pabellón Nacional sea izado a media asta los días 12, 13 y 14 de septiembre en todos los edificios públicos, instalaciones militares, locales policiales y dependencias del Estado.
Esta medida incluye también a las misiones diplomáticas y consulares de Perú en el extranjero, como un gesto de respeto hacia la figura del exmandatario.
El velatorio del expresidente se está llevando a cabo en el Ministerio de Cultura y se extenderá hasta el sábado 14 de septiembre, fecha en que los restos de Fujimori serán trasladados al cementerio Campo Fe de Huachipa para su sepultura.
Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, invitó públicamente a todos aquellos que deseen despedirse de su padre a asistir al velatorio.
El deceso de Fujimori marca el fin de la vida de una figura clave en la política peruana de las últimas décadas, cuya gestión estuvo caracterizada por la lucha contra el terrorismo y la implementación de reformas económicas, pero también por violaciones a los derechos humanos y actos de corrupción, que le valieron una condena de 25 años hasta su liberación en 2023.
La presidencia de Fujimori dejó una huella divisiva en la sociedad peruana. Aunque sectores de la población lo recuerdan como un líder que logró estabilizar el país tras años de violencia y crisis económica, otros lo critican por los abusos cometidos durante su gobierno.
Este duelo nacional resalta el legado controvertido de quien, pese a sus detractores, aún cuenta con un importante respaldo popular.
El sábado culminarán las ceremonias fúnebres, marcando el final de una era política en Perú, mientras los ciudadanos continúan debatiendo su impacto y legado en la historia reciente del país.