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Super Mario 64 Speedrunner hace historia con una carrera sin saltos

Ahora tiene la mira puesta en un objetivo aún más ambicioso: una carrera sin saltos con las 120 estrellas recolectadas

En una muestra de dedicación y dominio alucinantes, un speedrunner de Super Mario 64 conocido como Marbler ha logrado lo aparentemente imposible: completar el juego sin presionar el botón de salto ni una sola vez. Esta hazaña, registrada en un asombroso tiempo de 86 horas y 48 minutos, rebasa los límites del speedrunning y las limitaciones del juego.

El "A Button Challenge" (Desafío del Botón A) es una subcategoría de los speedruns de Super Mario 64 en la que los jugadores intentan completar el juego (o etapas específicas) con un mínimo de saltos. Dada la naturaleza de plataformas en 3D del juego, este desafío presenta un conjunto único de obstáculos. Sin embargo, la comunidad ha refinado constantemente las estrategias a lo largo del tiempo, lo que ha llevado al logro innovador de Marbler.

Si bien las carreras anteriores requerían uno o dos saltos, Marbler aprovechó una peculiaridad técnica de la versión de Wii Virtual Console. Aquí, los cálculos internos del juego redondean hacia abajo valores específicos, lo que hace que las plataformas se desvíen lentamente hacia el centro del nivel durante períodos prolongados. Marbler se aprovechó de esto dejando su consola funcionando durante más de 78 horas, lo que le permitió eludir una carrera de obstáculos normalmente infranqueable.

Esta estrategia que pone a prueba la paciencia no fue el único truco ingenioso empleado. Otra técnica llamada "conversión de velocidad vertical" consiste en manipular el impulso de Mario para impulsarlo hacia arriba. Al aterrizar estratégicamente de formas específicas, Marbler podía conservar impulso y utilizarlo luego para llegar a áreas más altas.

El último obstáculo llegó durante el encuentro final con Bowser. Aquí, una maniobra precisa llamada "Chuckya Drop" (Lanzamiento Chuckya) fue necesaria para sortear un laberinto desafiante sin saltar. Esto implicaba manipular a un enemigo específico, el Chuckya, para que lanzara a Mario en la dirección exacta. Si bien era teóricamente posible, no se había ejecutado antes de la carrera de Marbler.

El éxito del Lanzamiento Chuckya dependía de explotar la IA enemiga del juego y la distancia de dibujo limitada. Marbler maniobró meticulosamente al Chuckya fuera de la pantalla, esencialmente congelándolo en su lugar antes de manipularlo para lanzarlo a la ubicación exacta que necesitaba. Si bien esto aún implicaba un grado de suerte (una probabilidad de 1 en 32 de que el lanzamiento aterrice correctamente), Marbler mitigó esto empujando al enemigo hacia una zona de aterrizaje segura.

Toda la carrera, que abarca tanto el tiempo de juego como la preparación, representa un esfuerzo monumental. Marbler estima haber pasado más de 200 horas practicando y refinando estrategias, lo que culminó en este logro histórico. Para Marbler y los espectadores que presenciaron esta hazaña en vivo, fue un momento de pura historia del gaming.

Fuente: Kotaku


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