Core i9 en problemas
Intel investiga aumento de reportes de inestabilidad de CPU en juegos con Unreal Engine
Se recomienda a los usuarios mantenerse actualizados sobre los desarrollos de hardware a medida que avanza la investigación
Han surgido informes sobre un aumento en las devoluciones de CPUs gamer de Intel debido a problemas de inestabilidad durante el juego, especialmente en títulos desarrollados en Unreal Engine. Intel está investigando actualmente el asunto, aunque en el pasado se han planteado preocupaciones sobre problemas de estabilidad asociados con sus últimas CPUs de 13ª y 14ª generación.
A pesar de ser elogiados por su admirable rendimiento en múltiples hilos, los procesadores de gama alta de Intel han enfrentado críticas por su gestión térmica y consumo de energía. Las reseñas resaltan preocupaciones sobre la generación excesiva de calor y las demandas de energía que podrían afectar la estabilidad general del sistema.
La reciente ola de inestabilidad parece afectar predominantemente a juegos que utilizan Unreal Engine. Ejemplos incluyen Outpost: Infinity Siege y la demo de Tekken 8, ambos experimentando bloqueos y problemas de rendimiento específicamente en sistemas equipados con CPUs de 13ª y 14ª generación de Intel. Informes adicionales resaltan desafíos similares en otros títulos basados en Unreal Engine como Hogwarts Legacy y Overwatch 2.
Reconociendo las crecientes preocupaciones, Intel ha emitido un comunicado reconociendo los problemas reportados y afirmando investigaciones en curso en colaboración con afiliados de la industria. Sin embargo, se han abstenido de ofrecer detalles específicos sobre la causa raíz o posibles soluciones.
Aunque las CPUs Core i9 de Intel presumen impresionantes velocidades de reloj, persisten preocupaciones sobre su salida térmica y consumo de energía, especialmente en comparación con las contrapartes de AMD. Sin embargo, es importante ejercer precaución antes de atribuir todos los problemas de estabilidad únicamente al hardware de Intel.
No se puede descartar la posibilidad de problemas de compatibilidad de software entre Unreal Engine y la arquitectura de CPU de Intel, lo que sugiere posibles soluciones a través de parches de software.
En medio de estos desafíos, los consumidores que buscan soluciones de CPU orientadas al gaming pueden considerar alternativas como el Ryzen 7 7800X3D de AMD, que ofrece un rendimiento competitivo en juegos a un costo más bajo y con potencialmente menos preocupaciones sobre la gestión térmica y el consumo de energía.
Fuente: PCGamesN
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