Expansión inmobiliaria
Amura llega fuerte con proyectos en Surquillo y Barranco para captar segmento residencial moderno
Promueve edificios pequeños (≤ 70 unidades), oferta variada; proyecta inversión de US$ 16 millones

Foto: Emura Inmoviliaria
Lima, -La inmobiliaria Amura Inmobiliaria, presente desde el año pasado, ha anunciado su entrada firme al mercado de Lima moderna con apuestas concretas en Surquillo y un nuevo proyecto planificado en Barranco.
Su propuesta se caracteriza por desarrollar proyectos no masivos: edificios que tienen entre 20 a 70 departamentos como máximo. En estos edificios Amura ofrece unidades que oscilan entre 40 y 80 m², orientadas tanto para primeros compradores como para inversionistas.
En el primer año operativo, la empresa ha puesto en marcha dos proyectos, los cuales suman 60 departamentos en total. Uno de esos ya está en Surquillo, con entrega proyectada para diciembre de este año; el otro está en Pueblo Libre, en fase de planos.
Para seguir creciendo, Amura tiene en su cartera cuatro proyectos estimados para cerrar el año: además de los ya mencionados, un nuevo edificio en Surquillo en un terreno recientemente adquirido, y el proyecto en Barranco para el que ya firmaron una opción de compra para un lote de 400 m². En Barranco, las unidades planeadas serán más pequeñas en comparación con las actuales, aproximadamente de una y dos habitaciones.
En cuanto a inversión, la firma estima que los cuatro proyectos implicarán desembolsos cercanos a US$ 16 millones, siendo que solo el proyecto en Barranco demandará alrededor de US$ 6 millones. Además, para 2026, Amura proyecta adquirir al menos tres nuevas propiedades en Lima Moderna (Surquillo y Jesús María), con una posible inversión adicional de US$ 12 millones.
La comercialización está yendo bien: aproximadamente un 50-60% de la oferta ya ha sido vendida en los dos primeros proyectos de la empresa. Entre los compradores, además de quienes buscan vivienda para uso personal, también hay quienes lo adquieren como inversión, ya sea alquilando una habitación o destinando el inmueble para hospedaje temporal.
Una diferenciación importante de Amura es su enfoque territorial: distritos de Lima Moderna, con infraestructura creciente, oferta gastronómica y servicios, lo que añade valor a los proyectos. Surquillo, en particular, es visto como un distrito estratégico por su ubicación, mejoras urbanas recientes y demanda creciente.
Además, Amura ha incorporado un componente social. Tiene una alianza con Kusimayo, una asociación sin fines de lucro que trabaja en el altiplano, para construir “casas calientes” para familias vulnerables en Puno. Por cada dos departamentos vendidos, Amura contribuiría con mejoras en viviendas en esa zona.
Fuente: Gestión
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