Por Isaac Bigio
Hace 200 días el Dr. Vladimir Cerrón optó por fugarse para eludir la prisión. Según "Hildebrandt en sus 13", él es un protegido de Dina, quien antes fue militante, tesorera y candidata de su partido, quien no lo ha puesto en alerta roja policial y quien tal vez le visitó en un balneario del sur antes de que él habría tomado una avioneta rumbo al exterior en Pisco.
Perú Libre insiste en que su jefe es un perseguido político. Empero, aducen que él no es víctima del fujinorismo, sino de la izquierda "caviar', por lo cual es válido unirse a la ultraderecha contra casi todo el resto de quienes se reclaman socialistas o antiautoritarios.
Es ilustrativo que el prófugo ha sobrevivido a 3 distintos ministros del interior y que nunca se haya producido una ola de detenciones de sus partidarios para dar con quienes le cobijan, visten, alimentan o sirven de proveedores o correos. Cerrón no acepta que nadie le remplace en la secretaría general de PL, mientras que él sigue comunicándose con sus congresistas, directivos y bases, que ha convocado, organizado y supervisadas elecciones internas partidarias, y que pueda publicar decenas de mensajes en un día en sus redes sociales. Ante esa febril actividad comunicacional no sería difícil que un sistema de inteligencia le rastree y ubique.
Se supone que los legisladores existen para aprobar leyes y vigilar que estas se cumplan. No obstante, los congresistas de PL colocan en sus oficinas parlamentarias retratos del prófugo. El segundo vicepresidente congresal hace lo mismo y también siempre suele ponerse un polo apoyando a su hermano que desacata la ley. Y todos aquellos derechistas que juraban que los Cerrón nos iban a imponer una tiranía comunista, ahora no dicen nada. Para Keiko, Porky y Acuña, acusados de muchas malversaciones de fondos públicos, no está mal que Cerrón ande libre. A todos ellos les une su hostilidad a cualquier autoridad que quiera impartir la ley con fidelidad.
Los hermanos Cerrón no han estado contentos con el Rolexgate, algo que ignoran en sus redes. Para ellos este es un complot caviar. Mientras Waldemar planteó que él podría ser Premier de Dina, Vladímir le hace ver a su excamarada Boluarte que ella es víctima de los mismos que le persiguen.
Ya han pasado tantos días de la fuga de Cerrón como de la guerra de Gaza. Mientras decenas de millones han marchado en todo el planeta pidiendo cese al fuego, muy pocas decenas de personas en pocas partes del Perú sale a simpatizar con Cerrón, quien es ignorado por todos los encuestados en los sondeos de opinión.
Cerrón también anda muy perdido en su orientación. Dice que Dina dio un golpe reaccionarii contra Castillo, pero su bancada votó por su destitución y su hermano avaló ello diciendo que Dina al remplazarle cumplió con la constitución. Waldemar postuló dar voto de confianza al gabinete de la muerte de Otárola y luego remplazarle en su puesto para viabilizar el régimen de Boluarte. El cerronismo se llena de frases radicales, pero coadministra el congreso muy derechista y desacreditado, dio paso al actual TC conservador que excarceló al exdictador y apoya varias medidas contra las mujeres, el medio ambiente y el pueblo trabajador.
Isaac Bigio. Politólogo economista e historiador con grados y postgrados en la London School of Economics.
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