Trayectoria y legado
Alberto Fujimori: Del liderazgo político al escándalo y la prisión
El expresidente enfrentó el terrorismo y cayó por corrupción.
Lima.- Alberto Fujimori, quien gobernó el Perú entre 1990 y 2000, dejó una huella indeleble en la historia política del país.
Su llegada al poder comenzó con su sorprendente victoria en las elecciones presidenciales de 1990 bajo el partido Cambio 90, superando al escritor Mario Vargas Llosa.
Su lema, "Honradez, tecnología y trabajo", prometía un cambio en un Perú sumido en una crisis económica y golpeado por el terrorismo y el narcotráfico.
Fujimori asumió el 28 de julio de 1990 con un discurso que destacó los desafíos que enfrentaba el país, como la hiperinflación y la violencia.
En 1992, con solo dos años en el poder y ante la oposición en el Congreso, dio un autogolpe de Estado, disolviendo el Parlamento y tomando el control de las instituciones públicas.
Esto generó críticas internacionales, lo que lo llevó a convocar un Congreso constituyente, que redactó la Constitución de 1993, aún vigente.
En 1995, Fujimori fue reelegido tras vencer al exsecretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar. No obstante, su gobierno comenzó a desmoronarse en el 2000 cuando estalló el escándalo de los Vladivideos, que mostraban a su asesor, Vladimiro Montesinos, sobornando a congresistas para unirse al fujimorismo.
El escándalo provocó una crisis política, que culminó en noviembre de ese año con la renuncia de Fujimori enviada por fax desde Japón, donde se refugió tras un viaje oficial.
El Congreso no aceptó su dimisión y declaró la vacancia presidencial por incapacidad moral. Perú solicitó su extradición por delitos graves, incluidos homicidio calificado, pero Japón no respondió.
En 2005, Fujimori fue arrestado en Chile y extraditado en 2007. Fue condenado en 2009 a 25 años de prisión por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, casos emblemáticos de violaciones de derechos humanos durante su mandato.
Sin embargo, en 2023, recuperó su libertad gracias a la restitución de un indulto humanitario otorgado por el expresidente Pedro Pablo Kuczynski en 2017.
A pesar de su condena, Fujimori seguía siendo una figura influyente en la política peruana, siendo considerado por algunos como una opción para las elecciones de 2026.
Su reciente fallecimiento a los 86 años ha dejado un vacío en el partido Fuerza Popular, que lidera su hija, Keiko Fujimori.
El dirigente fujimorista Miguel Torres lo describió como "una persona que demostró que siempre hay esperanza, incluso en las peores crisis".
La familia Fujimori ha anunciado que el expresidente será velado en el Ministerio de Cultura y sepultado en el cementerio Campo Fe de Huachipa.
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