El secreto de los dominios web más visitados del mundo

Todos los que utilizamos Internet tenemos una serie de dominios que nos sabemos de memoria y que visitamos frecuentemente. ¿Cuál es el motivo de su éxito?

La estructura de un dominio web 

Todos los dominios web más competitivos constan de una estructura fija. Un aspecto esencial es el propio nombre del dominio que suele ser de menos de tres sílabas, no incluye signos ortográficos o números y se recuerda con facilidad. El nombre se asocia a una extensión que define el área de mercado o sector al que se dedica el sitio. Extensiones temáticas (como «.game») van creciendo al facilitarles la labor a los buscadores de Internet en lo referente a la clasificación de los sitios. Asimismo, el resto de elementos técnicos necesarios para que un sitio web se pueda consultar se le encargan a una empresa especializada que también ofrece propuestas como el alojamiento web, medidas de seguridad y todo lo relacionado con el registro del dominio a nombre del cliente.

Pero para elegir un buen dominio no solo basta con cumplir con las características mencionadas. Es imprescindible repasar cuáles son los más conocidos para percatarse de que también hay términos genéricos que encajan con todo tipo de propuestas. Su equilibrio con el diseño del logotipo es inexcusable, ya que la meta final debe ser siempre que el cliente identifique una imagen con un sitio web que dispone de una serie de servicios concretos o de unos contenidos que pueden resultar interesantes.

La actualización constante como recurso

Pensar que cuando un sitio web se sube a la red solo hay que encargarse de redactar contenidos no es demasiado realista. Si bien es cierto que los contenidos son los que van a generar tráfico orgánico, también los buscadores se encargan de ir marcando cuáles son las nuevas normas para que una web se pueda indexar. Así, actualizaciones como la de Google Translate han servido para poner el acento en las versiones en otros idiomas de un sitio web y también en cómo hay que renovar los términos de un sitio de manera constante si no se quiere perder competitividad.

Además, informaciones como las nuevas propuestas de Apple exigen que el diseño adaptativo se convierta en moneda de cambio para no perder nada del tráfico que se genera desde los dispositivos móviles. La labor técnica realizada por la empresa contratada será esencial para superar las metas previstas y, sobre todo, para conquistar a los usuarios potenciales con una oferta más completa. Resumiendo, la parte técnica ha de ser gestionada por profesionales y la relativa a los contenidos debería controlarse por parte de redactores expertos. El gestor de la web puede dedicarse a preparar los pedidos y a aprovechar mejor su tiempo de trabajo ofreciéndoles a sus clientes todo lo que necesitan. Se subraya que pensar que una web está terminada es un enorme error, puesto que se trata de un elemento vivo que exige los máximos cuidados y una revisión permanente de la oferta propuesta para que el merecido reconocimiento no tarde demasiado en llegar.

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