Accidente en Jorge Chávez

La CIAA informó de fatiga de controladores debido a la falta de protocolos

Las grabaciones de las cámaras de seguridad mostraron que los empleados mostraban signos de somnolencia y, en ocasiones, utilizaban sus teléfonos móviles personales durante su horario laboral.

Lima.- La Comisión de Investigación de Accidentes de Aviación (CIAA) publicó su informe conclusivo sobre el incidente en el aeropuerto Jorge Chávez ocurrido en noviembre de 2022, y señaló que los controladores aéreos de Corpac estaban fatigados debido a la falta de protocolos para abordar la fatiga.

En relación a las condiciones del accidente, el informe detalla: "En el día del incidente, el Equipo de Guardia número 1 en la Torre, compuesto por seis controladores según la programación, comenzó su turno de 12 horas a las 7:00 a. m. del 18 de noviembre de 2022. No obstante, cuatro de ellos estuvieron ausentes (67%) debido a varias razones, y tuvieron que ser sustituidos por personal en horas extra: tres controladores de otro equipo y uno del equipo de apoyo a la Coordinación General de Torre Corpac. El quinto controlador en la lista de miembros del Equipo número 1, según el orden de prioridad, asumió la supervisión de ese día".

En esa situación, "El Equipo número 1 llevó a cabo su turno con seis controladores, en algunos casos no logrando cumplir con el receso (descanso) mínimo establecido en la RAP 311 (30 minutos entre turnos)".

Sin embargo, en el momento del accidente, Corpac "no tenía implementado un Sistema de Gestión de la Fatiga conforme al párrafo 2.28 del apartado Gestión de la Fatiga de la RAP 311, que está directamente relacionado con el tiempo mínimo de descanso efectivo entre turnos de trabajo". Esta situación es preocupante porque, según la CIAA, el accidente "podría haber sido causado por la fatiga, lo que llevó a una disminución en los niveles de alerta".

El establecimiento de un protocolo era esencial debido a que, según las grabaciones de las cámaras de seguridad, "durante el turno de guardia, el personal de controladores mostró signos de fatiga, como somnolencia y posturas ergonómicas incorrectas".

Además, se descubrió que los empleados utilizaron sus teléfonos móviles personales mientras estaban de servicio, "lo que podría haber afectado su capacidad para concentrarse y mantener la vigilancia en relación con sus deberes laborales". Curiosamente, este comportamiento no fue notado por los supervisores en turno.

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